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La Sinfónica afronta conflictos

Uno de los diversos conflictos que afrontan los músicos de la Orquesta Sinfónica fue superado hoy con un principio de acuerdo con autoridades de la Secretaría de Cultura. Una sorpresiva asamblea de músicos suspendió las tareas de grabaciones del álbum “200 años de Música Argentina”, por una demanda no contestada iniciada hace un mes mediante notas ante la Secretaría de Cultura.

Se levantó un paro de la grabación del álbum

Los músicos pedían el cumplimiento de una ley vigente que obliga a la Provincia a reconocer un pago extraordinario por tareas de grabación. Por este hecho la grabación de la jornada vespertina de hoy martes 18, paralizó para dar lugar a la asamblea realizada en el Teatro Provincial.

La idea de los músicos era no continuar con las grabaciones del álbum. Pero la inesperada presencia y las explicaciones en medio de la asamblea del abogado Mariano Ovejero, Secretario de Cultura de la Provincia, frenó parcialmente el recrudecimiento de la problemática.

Tras la intervención del Secretario y luego de escuchado el ofrecimiento a sus reclamos la asamblea los músicos de la Sinfónica decidió por mayoría continuar con las grabaciones y supeditar el cobro de posibles regalías, a los resultados que arroje la distribución del álbum.

En futuras reuniones los músicos se inclinaron por la opción de acordar con la Secretaría de Cultura a donde se destinarán los resultantes económicos de la distribución del álbum, posterior a la grabación.

Los músicos debatieron entre tres posibilidades. Parar la grabación del álbum; supeditar la decisión de este conflicto a un árbitro o un juez; o negociar con la Secretaría a donde se destinan los dividendos que pudieran generar la distribución del disco.

El conflicto se resolvió por las explicaciones del Secretario de Cultura, ante dirigentes de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), delegados por parte de los músicos, Luis Gorelik, director de la Orquesta Sinfónica y el abogado de la mayoría de los músicos Juan Pablo Ochoa.

El doctor Ochoa dijo a Calchaquimix que para cumplir este objetivo “esperamos que la Secretaría empiece a tener ganas de sentarse negociar. El planteo radicó en la grabación de la Orquesta Sinfónica como un objetivo no habitual, porque “los músicos están contratados para ofrecer espectáculos públicos y abiertos. La ley dice claramente que se tiene que cobrar en la grabación”.

“La Secretaría no tiene fines de lucro y la grabación se hace a los fines de difundir cultura y no se puede tener a los trabajadores pendientes en el futuro a ver si cobran o no. De hecho, la Secretaría tiene la obligación de pagar la grabación, pero parece que está abocada a buscar interpretaciones contrarias a los derechos de los trabajadores, para no atender estos reclamos económicos legítimos. Los músicos solo querían ejercer su derecho de cobrar por grabar”, sostuvo Ochoa.

Agregó que el problema radica ahora en que no hay un parámetro de cuánto. Eso es lo que estará sujeto a negociación. Explicó que a este punto se llegó porque “no tuvimos la fortuna de negociar porque no hemos encontrado eco en la Secretaría. El planteo se hizo hace un mes por escrito y en forma verbal. No hubo ninguna respuesta hasta hoy (por ayer). El Secretario Ovejero no contestó nuestros pedidos, se presentó en la asamblea, pero previamente no se convocó a los delegados, ni a los asesores para trazar un parámetro del derecho de cobro de los músicos”, relató.

Por su parte el Secretario de Cultura, Mariano Ovejero, reconoció ante los músicos la demora en las respuestas. Luego de escuchar los diversos planteos referidos a los derechos que le correspondería por grabación, regalías y ejecutantes sobre la grabación. El funcionario ante la consulta de Calchaquimix, dijo que el planteo fue analizado por la asesoría legal de la Secretaría.

“Existe un dictamen y obviamente les corresponde los derechos de intérpretes y ejecutantes, pero una vez que la obra sea difundida y retransmitida, según los términos del artículo 56 de la Ley de Propiedad Intelectual. No así respecto a los derechos a la grabación, porque se hace en los horarios de trabajo.

Tampoco respecto a la regalías porque es el Estado a través de Instituto de Música y Danza hace frente al presupuesto que demanda la grabación, que está destinada a difundir la obra clásica argentina”, expresó Ovejero.

“La verdad, es que este no es el objetivo, porque tampoco sabemos si vamos a recuperar esta inversión. El objetivo es exclusivamente la difusión cultural. La Secretaría de Cultura entiende que los músicos no participan de esa inversión, así que las regalías no les corresponden, según lo que dice un dictamen interno. Entendemos que sí se genera un potencial beneficio adicional cuando la obra sea difundida, se les liquida directamente a través de la Asociación Argentina de Intérpretes”.

La aceptación de proseguir con la grabación, se resolvió tras el ofrecimiento puntual de la Secretaría, que si se llegaría a tener un ingreso en concepto de regalías, esa plata sea destinada a un incentivo monetario, a mejorar el equipamiento, a cursos de perfeccionamiento o para lo que ellos dispongan. Ese dinero ingresaría a un fondo del Instituto de Música y Danza como entidad autárquica, pero que se destinaría específicamente a la Orquesta.

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